jueves, 15 de noviembre de 2018

La recuperación en ESO: Qué, cuándo y cómo

Quizás, cuando hayas leído el título de esta entrada te haya sorprendido los tres interrogantes que pongo a continuación de los dos puntos. Aunque el tema es muy amplio y daría para mucho, voy a intentar, en el menos espacio posible, contestar a las tres.

Antes de meterme directamente con la primera de las preguntas, quisiera reproducir dos artículos de la  Orden de 14 de julio de 2016, por la que se desarrolla el currículo correspondiente a la Educación Secundaria Obligatoria en la Comunidad Autónoma de Andalucía.

El primer artículo está referido a los elementos de la evaluación, y dice:

Artículo 14. Referentes de la evaluación.

1. Los referentes para la comprobación del grado de adquisición de las competencias clave y el logro de los objetivos de la etapa en las evaluaciones continua y final de las distintas materias son los criterios de evaluación y su concreción en los estándares de aprendizaje evaluables a los que se refiere el artículo 2.

La intención de comenzar con ese artículo es la de recalcar que no son los contenidos los que debemos tener en cuenta a la hora de la evaluación y/o calificación, sino que el referente debe ser el criterio y, si los tiene, los estándares asociados al mismo.

¿Si los tiene? ¿Es que todos los criterios no tienen estándares?

Pues no.  Los criterios que tienen estándares son los que se han tomado (bien por copia o por adaptación de los mismos) de la Orden ministerial. Los criterios que Andalucía ha incluido en su desarrollo curricular, y que son propios de la comunidad autónoma no tienen asociados estándares.

Como paso previo para el desarrollo de esta entrada, he realizado un estudio sobre el mapa curricular de la ESO completa para la materia de Lengua Castellana y Literatura. Dicho estudio lo podéis consultar si os interesa en la siguiente dirección:

MAPA CURRICULAR LENGUA EN ESO.

En ese documento, están ordenados los criterios aparecidos en BOE, enlazados con los aparecidos en BOJA y con sus estándares asociados para cada criterio, desde primero a cuarto de ESO.

Si nos fijamos en el diseño curricular que aparece en el BOE, la primera diferencia que encontramos con respecto al currículo andaluz es que en el primero, todo el diseño está englobado en dos ciclos, el primer ciclo que comprende de primero a tercero, y el segundo ciclo que lo forma el curso de cuarto. Sin embargo, el BOJA desarrolla el currículo por niveles independientes, lo que hace que la visión global de ciclo desaparezca.

Como los criterios de evaluación están fijados en BOE para el ciclo completo, igual que los estándares, ya sabemos que el desarrollo del mismo debe contemplarse a nivel de ciclo, y no de curso individual.

Y aquí surge la pregunta ¿Y los contenidos?

Los contenidos no deberían ser evaluables "per se". Son los que se incluyen en cada uno de los criterios y/o estándares para poder desarrollar y evaluar estos últimos.

Un ejemplo.

 Escojo esta imagen ya que es una de las más complicadas del análisis. El criterio 4.3 que aparece en BOE y en BOJA para el primer ciclo, corresponde a la redacción completa del mismo, sin embargo para el segundo ciclo, la redacción se acorta, anulando el resto para el segundo ciclo. Aparece además el criterio 4.3 del segundo ciclo, que aunque diferente en su redacción, comparte estándares con el anterior.


¿Y para qué todo esto?

Pues para poder contestar a las tres interrogaciones.

¿Qué? ¿Cuándo? ¿Cómo?

Si ya hemos expuesto que los contenidos son la ayuda para poder desarrollar el criterio, y el este se repite en varios niveles, podemos plantearnos la posibilidad de la evaluación continua, y desterrar las "vueltas atrás" mediante exámenes de recuperación del alumnado que promocionó de curso con esa materia pendiente.  Si planteamos desde el departamento la visión lineal del criterio, y su consecución en cualquier momento, evitamos esas actuaciones sacadas de contexto.

La inclusión de un itinerario formativo acorde a los criterios (que ya hemos visto que se repiten) en una materia podría ser fundamental.

Pero entonces, ¿nos estamos saltando el currículo establecido para cada nivel?

Permitidme contestar a esa pregunta con un artículo de la Orden que cité al principio:

Artículo 2. Elementos del currículo.

5. Para el desarrollo y la concreción del currículo se tendrá en cuenta la secuenciación establecida en la presente Orden, si bien su carácter flexible permite que los centros puedan agrupar los contenidos en distintas opciones en función de su proyecto educativo y la necesaria adecuación a su contexto específico y a su alumnado.

Si la propia Owen permite que modifiquemos partes del currículo y adaptarlo,... ¿Por qué no lo vamos a hacer?

Podríamos estudiar en cada departamento la mejor manera para no repetir ni contenidos, ni estándares ni criterios, sino adaptar los mismos secuencialmente, y establecer así consecuciones parciales para poder calificar al alumnado.

Y ya por último, ¿merece la pena hacer esto cuando tenemos a las puertas una nueva reforma educativa, en la que se está hablando de quitar los estándares?

Creo que sí. Por mucha reforma que haya, habrá una serie de criterios que se repetirán a lo largo de cualquier reforma del currículo.

Siguiendo con mi propuesta ya realizada en varias entradas de este blog, sobre la utilización de listas de cotejo basadas en los criterios y de una forma progresiva (basándose en que el criterio es cíclico y en cuarto hay bastantes criterios que se repiten igual que en el primer ciclo, y que los estándares lo que pueden hacer es darnos ideas para la redacción de esas listas), puede resultar interesante tener un currículo adaptado a la realidad del centro. Y si viene la ¿temida/necesaria? reforma, podremos adaptar nuestro trabajo a los nuevos tiempos.










No hay comentarios:

Publicar un comentario